Café y ejercicio

Café y ejercicio
06/07/2020 12:00

Si has aterrizado en nuestro BLOG es muy probable que seas un gran amante del aroma y sabor del  buen café, pero ¿sabías que esta bebida te ayuda también a rendir más en el entrenamiento? Sus propiedades lo han convertido en el líquido ideal para tomar antes de tu actividad física diaria, ya que aumenta el rendimiento deportivo y la quema de grasa.

Profundicemos en los beneficios que una taza de café te puede aportar  en este campo:

Más activo. Una de las razones por las que el café se hace un hueco como bebida fit es su efecto estimulante, de ahí que antes de ponerse a hacer deporte, nos bebamos una taza de este delicioso manjar, lo que nos permitirá tener la mente más activa y preparada para el ejercicio físico, ya que el café es un estimulante natural.  Esta bebida incrementa la atención y concentración, lo que mejora la calidad de la rutina, siendo esta más efectiva y productiva.

Reduce la sensación de dolor. La cafeína aumenta la dopamina y la adrenalina, lo que lleva a una mayor tolerancia al dolor y esfuerzo (ver estudio) . Además, mejora la activación muscular y reduce la sensación de dolor post-entreno, haciendo de tu entrenamiento un momento más placentero (ver estudio)

Quema grasas. Algunos de los polifenoles del café aumentan la oxidación de grasa. A su vez, la cafeína incrementa el metabolismo y facilita la movilización de grasa (ver estudio), aumentando su oxidación durante el ejercicio físico (ver estudio). Además, eleva también ligeramente el efecto EPOC,  que hace referencia al consumo de oxígeno post-ejercicio que aumenta la lipolisis (ver estudio) .


Dosis recomendada

Por lo general, se recomienda no sobrepasar los 400 miligramos de cafeína. Para que te hagas a la idea: un espresso tiene aproximadamente unos 80 miligramos de cafeína por lo que podemos tomar entre 4 y 5 tazas diarias, aunque esto fluctuará un poco en función de la variedad del café y su altura. Además, cada cuerpo asimila la cafeína de manera distinta, así que te recomendamos ir probando para ver la cantidad que funciona mejor para tu organismo.

Debemos ingerir una cantidad suficiente que nos permita beneficiarnos de los efectos del café en nuestro cuerpo pero sin caer tampoco en el extremo. Como pasa con todo, mucho de algo bueno no significa mejor, por lo que sobrepasarnos podría llevar a un aumento del cortisol (hormona del estrés), una estimulación excesiva o malestar gastrointestinal.

Con una o dos tazas 45 minutos antes del entreno será más que suficiente para activar la quema de grasa durante el ejercicio.

Una vez terminada la sesión de ejercicios, en muchas ocasiones terminamos cansados y con poca vitalidad. De nuevo, el café nos aporta ese plus de energía, ayudándonos a recuperar fuerzas y aunar los nutrientes y vitaminas que el cuerpo necesita tras un esfuerzo.

Ahora que has visto todos los beneficios del café en el rendimiento deportivo, ¿a qué esperas para convertirlo en tu bebida pre-entreno?