¿Qué ventajas encontrarás en un café de tueste natural?
Sabor y aroma son dos de los pilares básicos de un buen café, perceptibles para el verdadero amante de esta bebida. Para conseguir una perfecta armonía entre ambos tendremos que tener en cuenta una de las fases clave a la hora de elaborar café: el tueste. Este punto del proceso es determinante para lograr el característico aroma de esta bebida, pero también su sabor. El café de tueste natural suele ganarse un lugar privilegiado entre los verdaderos amantes de la bebida.
En Cafés Lúa ya te hemos hablado de uno de los tipos de tueste más populares, el café de torrefacto. La peculiaridad de esta variedad se consigue añadiendo azúcar, en mayor o menor medida, durante el proceso de tostado. El resultado es una bebida con un sabor mucho más amargo y unos peores valores nutricionales; por lo que sin duda el café de tueste natural se sitúa como el preferido por los auténticos cafeteros.
Características del café de tueste natural
La principal diferencia del café de tueste natural frente al torrefacto reside, como bien indica su nombre, en un tostado 100% natural, sin ningún tipo de aditivo. Sólo de esta manera conseguiremos un sabor y aroma únicos, obteniendo todos los beneficios nutricionales del café y propiedades organolépticas. Como amantes del café que somos, en Cafés Lúa es nuestro maestro tostador quien elabora cada receta, aportando su toque personal a todos nuestros blends y orígenes.
Las ventajas de utilizar café de tueste natural son muchas, más allá de las que ya te hemos contado. ¿Adoras la crema sobre el café? El tueste natural te permitirá lograr una crema de mucha mayor calidad, uno de los requisitos que no pueden faltar en la taza de un cafetero que se precie.
Por otra parte, el sabor de un café de tueste natural cuenta con multitud de matices; algo de lo que te hablaremos más adelante. Una de las principales pegas que tiene el café de torrefacto es precisamente su amargor, que enmascara el propio sabor natural del grano, debido al añadido de azúcar durante el tostado.
Hay varios tipos de tueste natural, aunque todos ellos tienen algo en común: no se añade ningún aditivo, por lo que se obtiene una taza de café única, rica en aroma y sabor. Si quieres conocer cuáles son los tres tipos de tueste natural más habituales, presta atención a las próximas líneas:
Tueste oscuro: Un café de tueste oscuro es fácilmente reconocible gracias a sus tonalidades negras, aspecto que alcanza tras ser sometido a un tostado de mayor tiempo y temperatura. El café de tueste oscuro se ha ganado un lugar privilegiado entre aquellos cafeteros que buscan un sabor amargo y pronunciado. Tal vez entre los puntos menos fuertes de este tipo de tueste es que encontraremos un menor aroma y acidez.
Tueste medio: El café de tueste medio se ha hecho un hueco entre aquellos que quieren una taza con notas dulces. Parte del secreto reside en su proceso de tostado, en donde las temperaturas alcanzadas dotan al grano de una pequeña y fina capa que en muchos casos permite matices que recuerdan al chocolate o caramelo.
Tueste ligero: Su tono claro es la principal característica de este tipo de grano de café, fácilmente reconocibles por su tono marrón de bajo brillo. Si hablamos de sabor, el café de tueste ligero logra convertirse en el favorito de aquellos que disfrutan de una taza con gran acidez, dejando un aroma frutal y herbáceo.
Otras publicaciones relacionadas